UN PASEO POR LOS LUGARES DE INTERES CERCANOS A CASA RURAL RIO JUCAR
.casasruralesriojucar.es
LA
LLANURA MANCHUELA
Podemos
hacer un particular recorrido por once pueblos salpicados de
curiosidades y temas de interés. Todos ellos responden al
denominador común de una misma arquitectura tradicional, el
pueblo agrupado en torno a la iglesia o el ayuntamiento.
Madrigueras encontramos a los últimos
artesanos de "romanas", una bonita fachada Rococó en
la iglesia parroquial de San Pedro y San Pablo del s. XVIII, templo
de grandes proporciones y planta única. El interior es de gran
sobriedad y sobre el frontón se encuentra una estatua de San
Pedro. También encontramos una destacada industria cuchillera
y una gran concentración de cooperativas y bodegas..
Las Navas de Jorquera, se pueden ver las reliquias de San Eleuterio y San Liberato, albergadas en su iglesia, o, de camino a Cenizate, al "chozo roscao" una de las más claras muestras de la arquitectura tradicional de La Manchuela.
En Cenizate conviene visitar la iglesia parroquial de Nuestra Señora de las Nieves, declarada monumento de interés cultural, en cuyo interior se encuentra un precioso retablo barroco de San Antonio (siglo XVII), con pilastras de formas humanas y realizado en madera tallada y policromada, colocado en el altar mayor tras su restauración, además unos frescos pertenecientes a la pintura ornamental mediterránea de los siglos XVIII y XIX, y dos óleos sobre madera del XVII: Crucifixión (único resto conservado del antiguo retablo mayor de la iglesia) y el Retablo de San Martín, retablo mayor de la iglesia) y el Retablo de San Martín.
Cueva de los Angeles |
Villamalea.que cuenta como obras más importantes la iglesia barroca de la Anunciación y la ermita de la Concepción del mismo período, con artesonado y coloristas pinturas murales y desde donde parten las diferentes rutas que podemos hacer por las hoces del Cabriel.
El Herrumblar ya en la provincia de Cuenca, el último pueblo de la comarca cercano al Cabriel. Como lugar de interés natural destaca el paraje de Mortanchinos.
Galayo |
Golosalvo en este pueblo está ubicada la iglesia parroquial de San Jorge (siglo XVIII) donde se conserva la única estatua ecuestre de Salzillo, un San Simeón del mismo autor y una Virgen del Rosario barroca.
Mahora
nos traslada a un mundo pretérito cargado de esplendor
durante los siglos XVII y XVIII, donde se entremezclan los más
diversos estilos: gótico, renacimiento, rococó.
Destacan la parroquia de la Asunción, levantada con el
patronazgo del Marqués de Villena. Es una construcción
del S. XVIII y lo más característico es su torre de
planta cuadrada que se remata con un cuerpo octogonal con chapitel y
la combinación de estilos desde el gótico al barroco.
La sacristía conserva unas grisallas de los SS XVI-XVII, y un
crucificado de marfil hispano filipino del S. XVII y un bello Niño
Jesús, parte del convento franciscano de la Concepción
de Nuestra Señora, en las afueras. Hay numerosas casas
nobiliarias con portadas de sillería y labras heráldicas
y una casa-palacio con portada y torre de finales del seiscientos.
Abengibre se han hallado importantes restos ibéricos como los platos de plata de Abengibre. Estos fueron hallados en 1934 en el llamado Vallejo de las Viñas, tienen una antigüedad de más 2.500 años y sus inscripciones todavía no están totalmente descifradas. Aunque la vajilla original permanece en el Museo Arqueológico Nacional de Madrid, actualmente hay ocho réplicas de distintos tamaños de los 22 platos que componen la colección expuestas en la Casa de la Cultura de Abengibre.
Casas
Ibáñez, eje de
toda la comarca de La Manchuela, está la iglesia parroquial;
obra barroca del S. XVII y comienzos del XVIII, con sucesivas
reformas y que alberga un notable Cristo de marfil. En las afueras se
levanta la Ermita de la Virgen de la Cabeza.
Alborea,
del árabe Al-Burayat, "la torrecilla", cuyo origen
proviene de una torre del S. VIII que fue construida para vigilar la
calzada de Chinchilla a Requena; fue una de las aduanas del Señorío
de Villena en el camino al reino de Valencia. Su iglesia parroquial
de la Natividad, conocida como la Catedral de La Manchuela, es una
curiosa construcción iniciada en el S. XVI en estilo gótico,
aprovechando una de las paredes de la torre árabe que todavía
se conserva, continuada a finales del XVI y ampliada en el XVII.
Destaca una capilla lateral decorada con frescos del s. XVIII
En
el coche, conduciendo por tierras manchegas . El paisaje es
totalmente llano en su mayoría y cuando más confiado
vas en la carretera , de repente te encuentras con una brecha en la
montañosa que se adentra en la tierra y entonces sabrás
que has llegado. Es Alcalá del
Júcar
. Comienzas a bajar por sus exageradas curvas , que poco a poco te
van dejando ver el grandioso territorio y sin querer, quitas el pie
del acelerador y te paras en uno de sus miradores para contemplar el
paisaje. Quieres mirarlo bien, disfrutarlo. Sus casas pueblan la
ladera de las montañas y si es de noche, verlo iluminado
resulta impactante. Alcala del Júcar
sin duda es uno de los pueblos que hay que visitar cuando se pasa
por Albacete.
Puedes ir a lo más alto, el
Castillo ,
luego La Iglesia de San Andrés
e ir bajando por sus calles empinadas hasta la orilla del río
cruzar el
puente y
bajar a la playa que
hace el río Júcar,
donde si hace buen tiempo puedes darte un chapuzón. También
podemos pasarnos a ver la plaza de
toros y las
casas cueva ,
que parecen casas normales pero al fijarnos vemos que las
habitaciones son cuevas. Se dice que sirvieron como refugios y al
estar hechas con piedra, la temperatura en verano es fresca y en
invierno es cálida. La población siempre se ha dedicado
a la agricultura y la ganadería y con el paso del tiempo al
turismo rural, por ello se han construido restaurantes, hoteles y
casas rurales que ofrecen muchas actividades relacionadas con la
naturaleza. Una de sus fiestas más conocidas es San Lorenzo ,
el patrón del pueblo. Se celebra en agosto. Cuando estemos en
Alcalá del Júcar, también podemos visitar otros
bonitos pueblos de sus alrededores, muchos de los cuales son pequeñas
aldeas que no llegan a tener más de treinta habitantes. Os
recomendamos que paséis por
Jorquera ,
un municipio que forma un cañón de 200 m de altitud,
Casas del Cerro
, Villavaliente
famoso por sus cucos
o Las Eras
pero sobre todo no te puedes ir sin visitar Tolosa
donde el Júcar
se hace grandioso y podemos disfrutar de un maravilloso paisaje .
Gracias a sus curvas para acceder y salir del pueblo, Alcalá
se convierte en un sitio perfecto para las rutas
moteras ,
ya que durante el recorrido puedes disfrutar constantemente de unas
grandes vistas . Además, fue declarado conjunto
Histórico-Artístico por Real Decreto en 1982 . Te
recomendamos que si tienes unos días libres, visites Alcalá
del Júcar
y que si quiere te puedes alojar en Casa
Rural Río Júcar
te sorprenderás .
Alcalá
del Júcar
es una población destacada a partir de la entrada de los
árabes en la Península. Éstos levantan una
fortaleza de aspecto ciertamente inaccesible, aprovechando un
elevado promontorio desde el que se domina el río y todo el
entorno. La fortaleza tiene como objetivo proteger las fronteras
musulmanas de los reinos cristianos, . Sin embargo, las defensas
musulmanas no pueden impedir la entrada, en 1211, de las huestes
cristianas, que toman los castillos de Garadén, Jorquera y
Alcalá. Un año más tarde, en 1212, la victoria
de los reinos cristianos sobre los almohades en la batalla de las
Navas de Tolosa significará el declive de éstos . De
este largo y esplendoroso pasado ha quedado un buen puñado de
monumentos y riquezas artísticas como
La Iglesia de San Andrés, el puente romano, el castillo, o su
peculiar plaza de toros.
El
Júcar
nace en la Serranía
de Cuenca
y atraviesa La
Manchuela,
donde crea un agreste paisaje entre las provincias de Cuenca
y Albacete.
Su cauce atraviesa numerosas zonas de olivos,
de robledal y campos de labor hasta formar en la zona de la
Manchuela,
en la provincia de Albacete,
un cañón de gran belleza paisajística e interés
geológico, donde la hoz del Júcar nos ofrece un
espectacular paisaje Alcalá
del Júcar ,
joya de la región de Castilla
la Mancha. Fue
declarado conjunto historico artistico y esta considerado como uno de
los pueblos más bonitos de España. ,
se
encuentra en el Nordeste de
Albacete.
Emplazado en uno de los meandros del río
Júcar,
dentro de la zona conocida como la Hoz
del Júcar.
Al norte limita con Casas-Ibáñez,
al sur Casas
del Cerro.
Al este se halla el embalse de El
Molinar,
al oeste está Jorquera.otros
pueblos limitrofes son: Abengibre
, Alatoz , Alborea , Carcelén, Casas de Ves , Fuentealbilla y
La Recueja
.
Dista
45 kilómetros de Albacete.
Está
compuesto por seis núcleos: Alcalá, Las Eras , Casas
del Cerro , La Gila , Zulema y Tolosa . La principal actividad de los
habitantes de Alcalá del Júcar es la agricultura y la
ganadería y, cada vez más, el turismo rural.
Pueblo
construido en el flanco de un acantilado, dibujado por un meandro del
río y coronado por un castillo.Son famosas las casas
cuevas de Alcalá del Júcar. La
ciudad está construida de forma escalonada por la pendiente
hasta llegar a las orillas del río. A primera vista, pueden
parecer viviendas normales, pero resulta que las fachadas esconden
una serie de cuevas, que son las habitaciones de las casas. Son casas
que se mantienen frescas en verano y cálidas en invierno.
Alcalá
del Júcar disfruta de un clima mediterráneo
continental. Se caracteriza por los inviernos largos y fríos y
los veranos calurosos y secos. La pluviosidad es escasa
Gastronomía:
Platos típicamente manchegos, como la perdiz escabechada, la
paletilla de lechal al horno, el cabrito con ajos, el gazpacho
manchego, las migas del pastor y el postre típico de Alcalá
son las natillas. El vino elaborado cerca de Alcalá del Júcar
es recomendable, como muchos otros vinos manchegos.
PLAZA
DE TOROS ALCALA DEL JUCAR
Fue
estrenada en 1912 y es una de las más antiguas de España,
levantada sobre un cerro, con forma irregular y graderío de
piedra ,,se
cree que pudo ser lucerna paleocristiana,
presenta aproximadamente 1000 localidades.
CASTILLO DE ALCALA DEL JUCAR
- Los orígenes del castillo se remontan a época musulmana, a finales del siglo XII
- Situado en lugar privilegiado, dominando la población, . Se ha reconstruido en varias ocasiones, se cree que el aspecto que hoy presenta es causa de las transformaciones realizadas en época cristiana. El castillo consta de tres plantas, un torreón de forma pentagonal, con dos pequeñas torres de planta circular situadas en los ángulos rectos.
En el exterior se pueden observar restos de antigua muralla de la población.
En 1994 se acondicionó el entorno natural para facilitar la entrada al castillo. - El edificio de aquella fortaleza era de mampostería y tenía dos mazmorras y otros tantos molinos de mano; un puente levadizo, dentro una cisterna para el agua pluvial, y una mina abierta en la misma peña para bajar por agua al río Júcar". .Se diferencian dos elementos constructivos militares: el recinto de la puebla y el castillo propiamente dicho.
- En el interior de la meseta, se pueden observar los cimientos de la antigua iglesia.
- La entrada actual se realiza por un puente fijo, en tiempos remotos sería una pasarela y después puente levadizo, que salva el impresionante foso excavado en la roca, situándose esta entrada al norte de la fortaleza.
- La torre del Homenaje, de planta pentagonal, tiene dos borjes contrafuertes en la zona sur, la que daría a la población la más vulnerable a un ataque de tropas.
- El ingreso a este recinto fortificado se accede a los adarves y de aquí a la torre del Homenaje.
- Actualmente se realiza por un puente de piedra que vuela sobre el pequeño patio de armas; pero en la antigüedad se haría por un puente levadizo, como atestiguan los dos mechinales por los cuales pasarían las cadenas que izarían el puente.
- Esta torre tiene tres plantas más el terrado, en la baja se puede observar la almagra del aljibe a las otras se accede por medio de escaleras de caracol
- El río Júcar forzó en distintas fechas su restauración, la más reciente en 1.990, sustituyendo la albardilla deteriorada por la erosión y pavimentación a base de piedra natural de Alcalá, por los talleres de albañilería y cantería de la Escuela Taller I.
En 1994, con el
proyecto II de Escuela Taller de Alcalá del Júcar, se
acondicionó el entorno natural, mejorando la entrada del
Castillo.
IGLESIA DE SAN
ANDRES.
Parroquia
de San Andrés (siglo XVI al siglo XVIII)
Y
responde a distintos estilos
con pórtico de entrada neoclásico.Su
bóveda es del gótico tardío y el crucero posee
una cúpula barroca. La torre, es de estilo academicista.
PUENTE
ROMANO
Puente
sobre el río Júcar romano y reconstruido en el siglo
XVIII.
TOLOSA
Una
vez que hemos partido de Alcalá del Júcar, nos
dirigimos por el margen izquierdo del río en dirección
a Tolosa, aquí el Júcar se ensancha y sus aguas
circulan tranquilamente por lo que se hace fácilmente
navegable, existiendo en la zona empresas que ofrecen cursos de
piraguas.
Aquí el camino se hace mas inaccesible para los vehículos pero aún podremos circular unos cuantos km. por los caminos habilitados para las dos antiguas centrales hidroeléctricas hasta llegar al Tranco del Lobo y El Molinar.
Aquí el camino se hace mas inaccesible para los vehículos pero aún podremos circular unos cuantos km. por los caminos habilitados para las dos antiguas centrales hidroeléctricas hasta llegar al Tranco del Lobo y El Molinar.
Una
vez que hemos disfrutado de estos bonitos parajes, volveremos otra
vez a Alcalá del Júcar, donde nos desviaremos con
dirección a Casas de Ves, contemplaremos por el camino los
campos de viñedo y los cucos que son numerosos por esta zona.
TRANCO
DEL LOBO
Puente colgante restaurado
recientemente , el antiguo puente fue destrozado por la riada de1982
.
En
esta zona es donde el rio se canaliza para dar paso al salto de agua
que tiene la central del tranco. Cuando el agua no se canaliza en
esta zona se produce un salto de agua espectacular.
EMBALSE
EL MOLINAR
HISTORIA
DE LA CENTRAL HIDROELÉCTRICA DEL MOLINAR.
Desde
tiempo atrás, en efecto, la potencia hidráulica del
Júcar venía siendo utilizada por los numerosos molinos
y batanes que jalonaban sus orillas A mediados del XIX, Madoz,
describe este mismo tramo del Júcar en Alcalá con
similares términos: cinco presas para tomar el agua del Júcar,
un batán y dos molinos harineros y otro más en los
confines con Casas de Ves, el cual tiene una parada con cuatro ruedas
y un buen puente de madera.
Muchos de
estos artefactos se transformaron en minicentrales hidroeléctricas
para abastecer las zonas próximas .
Este
fue el caso que nos ocupa. El tramo del río, entre Villa de
Ves y Cofrentes, presenta un importante desnivel de más de 400
m. que se vierte en numerosos manantiales. En este tramo existía
desde finales de la Edad Media“una casa de molino que tiene dos
ruedas, del concejo” y que se había mantenido productiva
hasta mediado del XIX, pues es citada por Madoz, con similares
términos. La permanencia del ingenio harinero fue el origen
del topónimo con que se conocía a este paraje del río:
El Molinar y servirá también para denominar a la nueva
presa hidroeléctrica que se iba a construir en el lugar,
iniciando esta interesante historia de la intervención del
hombre sobre la naturaleza.
Como ocurrirá a lo largo de la centuria, en estos procesos de construcción de embalses, el comienzo de la obra supuso la llegada de miles de trabajadores, técnicos, ingenieros, directivos, etc. para los que, en Villa de Ves se construyeron tres poblados. Además, para las labores de peonaje se contrató a muchos campesinos de la tierra, cuyas condiciones de trabajo eran muy duras. Así lo relataba el nieto de uno de estos trabajadores: “Mi abuelo me decía que lo había pasado muy mal en ocasiones; que esos trabajos habían sido muy duros; todo a base de pico y pala, a golpe de maza. Una sardina y pequeño pedazo de pan era el único alimento diario y eso cuando comían porque a veces ni siguiera eso. Trabajaban sin parar. Se construyeron unos pabellones de caña, cubiertos por un tejadillo para guarecer a la gente que allí malvivía. Eran como una especie de chozas, sin agua ni higiene de ninguna clase. Había también un economato pero a algunos su sueldo no les permitía acercarse a este” . Los directivos e ingenieros se alojaron en casas de los pueblos de la comarca.
Los trabajos previos y el transporte de materiales supusieron las mayores dificultades. Fue preciso abrir carreteras, sendas y caminos, desmontar laderas y disminuir desniveles para poder llegar al fondo de del río. Por el contrario, la construcción de la presa, puramente tal, no planteaba especiales problemas técnicos, en principio, pues se aprovechó la del antiguo molino, solo que fortalecida y recrecida. Peor fueron las obras de perforación de la roca para la construcción de un canal de 4 km. de los que 3 eran subterráneos, abiertos a golpe de barreno. Por eso, barreneros y capataces eran los obreros mejor pagados. Con este canal se conseguía, en esa corta distancia, casi 65 m. de desnivel. Además, hubo que construir un depósito de conducción forzada, con sus correspondientes tuberías y compuertas que terminaban en la Casa de Máquinas, un edificio de planta rectangular y tres alturas, de 43m2. por planta y 11m. de altura. Estas obras complementarias se acabaron en julio de 1909.
Hubo que recurrir a mulos y borricos para explorar sendas y abrir a pico y pala un camino en la margen derecha antes de iniciar, a golpe de barreno, la excavación de los túneles”. Para ello, y como en las obras públicas de antaño, hubo que recurrir a yuntas de bueyes, animal prácticamente desaparecido del campo español desde mediados del siglo XVIII, y ausente de la comarca desde mucho antes, lo que explica que muchos de los contratados fueran expertos en ganado. La infraestructura técnica de transporte era bastante primitiva y, según confiesan algunos familiares de protagonistas de aquella empresa, se reducía a unas carretillas sujetadas por un cabestrante que llevaban las piezas más ligeras.
Como ocurrirá a lo largo de la centuria, en estos procesos de construcción de embalses, el comienzo de la obra supuso la llegada de miles de trabajadores, técnicos, ingenieros, directivos, etc. para los que, en Villa de Ves se construyeron tres poblados. Además, para las labores de peonaje se contrató a muchos campesinos de la tierra, cuyas condiciones de trabajo eran muy duras. Así lo relataba el nieto de uno de estos trabajadores: “Mi abuelo me decía que lo había pasado muy mal en ocasiones; que esos trabajos habían sido muy duros; todo a base de pico y pala, a golpe de maza. Una sardina y pequeño pedazo de pan era el único alimento diario y eso cuando comían porque a veces ni siguiera eso. Trabajaban sin parar. Se construyeron unos pabellones de caña, cubiertos por un tejadillo para guarecer a la gente que allí malvivía. Eran como una especie de chozas, sin agua ni higiene de ninguna clase. Había también un economato pero a algunos su sueldo no les permitía acercarse a este” . Los directivos e ingenieros se alojaron en casas de los pueblos de la comarca.
Los trabajos previos y el transporte de materiales supusieron las mayores dificultades. Fue preciso abrir carreteras, sendas y caminos, desmontar laderas y disminuir desniveles para poder llegar al fondo de del río. Por el contrario, la construcción de la presa, puramente tal, no planteaba especiales problemas técnicos, en principio, pues se aprovechó la del antiguo molino, solo que fortalecida y recrecida. Peor fueron las obras de perforación de la roca para la construcción de un canal de 4 km. de los que 3 eran subterráneos, abiertos a golpe de barreno. Por eso, barreneros y capataces eran los obreros mejor pagados. Con este canal se conseguía, en esa corta distancia, casi 65 m. de desnivel. Además, hubo que construir un depósito de conducción forzada, con sus correspondientes tuberías y compuertas que terminaban en la Casa de Máquinas, un edificio de planta rectangular y tres alturas, de 43m2. por planta y 11m. de altura. Estas obras complementarias se acabaron en julio de 1909.
Hubo que recurrir a mulos y borricos para explorar sendas y abrir a pico y pala un camino en la margen derecha antes de iniciar, a golpe de barreno, la excavación de los túneles”. Para ello, y como en las obras públicas de antaño, hubo que recurrir a yuntas de bueyes, animal prácticamente desaparecido del campo español desde mediados del siglo XVIII, y ausente de la comarca desde mucho antes, lo que explica que muchos de los contratados fueran expertos en ganado. La infraestructura técnica de transporte era bastante primitiva y, según confiesan algunos familiares de protagonistas de aquella empresa, se reducía a unas carretillas sujetadas por un cabestrante que llevaban las piezas más ligeras.
SENDERO DE LA
CENTRAL
Para
llegar al punto de partida de este sendero debemos tomar la carretera
que baja al embalse, cruzamos por el túnel que hay antes de cruzar
sobre la presa, a partir del cual comienza la pista de tierra, y tras
subir durante 400 metros, tomaremos la bajada a la izquierda que
abandona la senda principal. (Es la entrada a las antiguas casas de
El Molinar)
Bajamos
300 metros, dejando a la izquierda el poblado del Molinar, y llegamos
a un rellano entre árboles donde dejaremos el coche.
Observaremos
la entrada al túnel que tras 6 km. llega a la Central Hidroeléctrica
de El Molinar, objeto de esta excursión.
A
la izquierda de la entrada al túnel parte el sendero que buscamos.
El
sendero nos llevará a lo largo del desfiladero, entre árboles y
junto al río. Aunque en algún punto el camino se ha perdido por
efecto de las lluvias y la falta de mantenimiento, se trata de una
ruta muy agradable, cuyo colorido cambia según la época del año, y
que podemos realizar acompañados de niños.
La
senda se adentra en el desfiladero hasta llegar, entre cañizos,
hasta la central hidroeléctrica que dió por primera vez luz a
Madrid allá por el año 1.912?. El edificio, en estado ruinoso, nos
sorprende por su tamaño, que da idea de la magnitud de la obra.
La
vuelta la realizaremos por el mismo sendero. Disfrutarlo porque es
una joya que muy pocos conocen.
Distancia:
12km
Dificultad:
0: cualquier estación